NI ARTE NI EDUCACIÓN
Una experiencia en la que lo pedagógico vertebra lo artístico
FECHAS: desde el 30 octubre 2015 al 10 enero 2016
LUGAR: Nave 16 de Matadero Madrid
ORGANIZADO: Matadero Madrid, Pedagogías Invisibles y GED (Grupo de pensamiento Educación Disruptiva de Matadero Madrid)
ACTIVIDADES: Ver Programa de Actividades
Ni arte ni educación es una exposición y programa de actividades que pretende explorar las zonas de contacto de dos campos discursivos: el arte y la educación, y la articulación de ambos en la sociedad contemporánea. Los contenidos de Ni arte ni educación se vertebran a través de tres líneas de trabajo:
– Activismo y pedagogía, que vincula el pensamiento y la reflexión sobre la educación con el deseo de impulsar una acción transformadora de lo social.
– Intersecciones de la otredad, donde visibilizamos los pliegues de la diversidad desde sus intersecciones y abordamos las diferentes identidades como algo complejo que crece y muta en el intercambio entre colectividades.
– Ciudadanía crítica, enfocada al empoderamiento de las comunidades, su participación en lo público y la apertura de éstas a nuevas posibilidades.
Estas líneas han venido perfilando el marco para el trabajo desarrollado desde el Grupo de pensamiento de Educación Disruptiva de Matadero Madrid (GED), creado en el 2013 y coordinado por el colectivo Pedagogías Invisibles, con el objetivo de generar un espacio para reflexionar sobre la importancia de lo educativo en la construcción de lo social. Ahora se impone la necesidad y el compromiso de presentar públicamente su andadura y sus resultados a la comunidad, explorando espacios y formatos que posibiliten la participación.
Surge así la exposición Ni arte ni educación y los veintiún proyectos que la articulan: Historia de una plaza de Maite Angulo, Inclasificable de Paloma Calle, El museo es una escuela de Luis Camnitzer, Afro in progress de Ana Cebrián, Murciélago de Christian Fdez Mirón, Ya había explicado esto antes, pero la historia cambia cada vez que la explico de nuevo de Jordi Ferreiro, Agitar la incertidumbre: no exponemos, acampamos de Marta G. Cano, Task Party de Oliver Herring, Wiki kiosko de Laagencia, Un poco de luz de Marta de Gonzalo y Publio Pérez Prieto, La Brecha de Núbol, Next level: Jugando con la realidad de Xandra Villar Amigo, AIREA de Amanda Robledo y la Fundación Tuya, Paisajes de Laura Bañuelos, Teen Tero de Cross Border Project, Pares Sin Pares de Joana Macedo, La tercera oreja de Andrea De Pascual, Daniel Durán y Javier Durán, PDF deMaría Acaso, Humanae ¿Color carne? de Angélica Dass, Antes de que se vuelva pedagogía de Mônica Hoff, y Narrativa.Levitar de Madstock.
Desde formatos tan diferentes como la instalación, el taller, la fiesta, el vídeo, el audio, la documentación o la investigación, todos estos proyectos han sido pensados como dispositivos pedagógicos y no como obras de arte. Ello responde al interés por replantear los privilegios de las producciones artísticas y curatoriales, y el conocimiento que estas generan, para situarlas al mismo nivel que las producciones educativas.
Ni arte ni educación es un proceso articulado en torno a las microexperiencias que proponen sus dispositivos para conformar una macroexperiencia colectiva. Esto se hace posible a través de las activaciones propuestas en la programación que pretende dar vida al espacio expositivo haciendo que este se transforme. Proceso que se irá recogiendo y expandiendo en la plataforma web www.niartenieducacion.com
Además, se llevará a cabo una convocatoria de cesión ciudadana, que acogerá las propuestas provenientes y gestionadas por colectivos, escuelas, asociaciones vecinales… Se trata de abrir espacios y tiempos para incorporar y visibilizar al público y a la comunidad como un agente más en la ecuación de producción de conocimiento y cultura.
Tanto el arte como la educación han dejado de ser conceptos obvios, se han separado de los ámbitos institucionales (la academia, el museo, la escuela…) que los acotaban y legitimaban, diseminándose ahora por todos los intersticios de lo real. Es un momento de crisis en el que reconocemos la ocasión para explorar la nueva complejidad de los encuentros entre ambos ámbitos. En Ni arte ni educación se desea que la confluencia entre los dos conceptos comprometa a ambos en su negatividad y su actual falta de evidencia. Es la potencialidad de un carácter intermedio, liminal, de un espacio transdiscipliar: arte+educación.
Información sobre proyectos
En Historia de una plaza, Maite Angulo investiga la dimensión relacional de la experiencia estética en prácticas artísticas de contexto, desde su implicación y análisis del proyecto El Campo de Cebada. Se interesa por los procesos creativos de bricolaje colaborativo, do it yourself y do it together. A lo largo de su práctica artística ha trabajado la idea de archivo como un proceso abierto, multiforme e incompleto en relación a las dialécticas entre lo público y lo privado, la representación y la acción.
Inclasificado es una propuesta de Paloma Calle en la que dialoga con lo público y lo privado, con lo íntimo y lo expuesto, proponiendo una experiencia de profunda intimidad dentro de una instalación en la que habrá construida una casita pequeña donde las personas sólo podrán entrar de una en una y en la que sólo podrán permanecer sentadas o agachadas mientras se les pide que rellenen unos test relacionados con la orientación sexual y la multidimensional escala de la sexualidad.
El museo es una escuela: el artista aprende a comunicarse, el público aprende a hacer conexiones es la obra que Luis Camnitzer propone reproducir en el contexto de Ni arte, ni educación. Ésta, sistematiza la práctica educativa que el artista ha trabajado en las últimas décadas: escritos, conferencias y proyectos artísticos. En cada contexto la frase se resignifica, predispone al espectador que ingresa al museo y construye una actitud en el visitante que lo ubica como un punto central en el proceso educativo del arte.
Afro in progress de Ana Cebrián se sitúa en el campo donde se entrecruza lo político con lo personal en el ámbito de lo privado. Se centra en la idea de legado, veracidad histórica, identidad colectiva, representación institucional y la diferencia entre “el saber dentro de la propia comunidad” y “el saber legitimado desde los grupos de poder”. La idea es ofrecer desde La AFROcolaboradora (su página Facebook sobre etnoeducación y artivismo), una convocatoria para diferentes agentes afro (en todo el mundo) que quieran participar en un proyecto de arte+educación que se traduzca en una obra que materialice la “identidad negra” representada en el imaginario colectivo de la diáspora.
Christian Fernández Mirón propone Murciélago, una suerte de laboratorio de investigación vocal, tomando forma a lo largo de Ni arte ni educación como una serie de encuentros en el espacio expositivo. Se experimentará con la voz como accionador universal, explorando su potencial como herramienta de conocimiento, corporalidad y creatividad. No tendrán cabida los parámetros hegemónicos del buen o mal cantar y partiremos del cuestionamiento de la emisión vocal convencional. El laboratorio tendrá como objetivo indagar en las facetas más desconocidas de nuestra voz para alcanzar el descubrimiento, tratando temas como la colaboración.
La propuesta de Jordi Ferreiro es una investigación donde se hibridan arte y educación para construir espacios de conocimiento desde la euforia y la sorpresa. Utiliza formatos tradicionalmente entendidos como educativos para transformarlos en proyectos híbridos como es el caso de Ya había hablado de esto antes, pero la historia cambia cada vez que la explico de nuevo en la que pretende posicionar la visita guiada como un formato artístico mientras se analiza el uso de la manipulación implícita que hay en su práctica y que podemos encontrar en general en cualquier transmisión de contenidos entre un orador y su público.
Marta G. Cano se interesa por los espacios públicos restringidos, los movimientos y acciones a que dan lugar, las resistencias que provocan y las posibilidades que de esas relaciones pueden surgir. En su propuesta Agitar la incertidumbre. No exponemos Acampamos se interroga por cómo producir procesos y dispositivos de participación y transformación en comunidades no permanentes vivenciados a través del formato de la acampada acercándose a cuestiones relativas a la visibilización de los estudiantes de Educación en su proceso de formación, siendo el punto de encuentro la asignatura de arte.
El trabajo de Oliver Herring incluye vídeos stop-motion, fotoescultura y performances improvisadas y participativas como las Task party. A través del azar, lo inesperado y estructuras de juego, en sus vídeos y performances libera a los participantes de prejuicios permitiendo que exploren aspectos de su personalidad a través del arte.
El Wiki kiosko de Laagencia apunta a construir una plataforma en forma de kiosko, que recoja diferentes ejemplos de autopublicación de Bogotá y Madrid, acumuladas por medio de convocatorias, voz a voz, colección propia y ayudándose de entrevistas, encuentros, talleres conjuntos y eventos.
Siguiendo con su línea de reflexión sobre alfabetización audiovisual, educación artística, pedagogías críticas y metodología de la práctica cultural Marta de Gonzalo y Publio Pérez Prieto presentan Un poco de luz, una cámara oscura que se constituye como un espacio experiencial por un lado una metáfora ampliada de la acción intuitiva de ver, y por otro, una invitación a la acción: modificamos lo que vemos-vivimos, en la medida en la que somos capaces de modificar lo que ocurre ante nuestros ojos o su interpretación.
Núbol, formado por Clara Megías y Eva Morales, presenta La Brecha, proyecto que parte de una problemática concreta a la que se ven enfrentadas en su día a día: el alejamiento de arte contemporáneo de los procesos educativos y la falta de interés por parte de los profesores. Su propuesta tiene la intención de descubrir, profundizar y visibilizar los motivos por los que el arte contemporáneo produce este rechazo y en consecuencia este alejamiento y desinterés por parte de los futuros profesores (como contexto micro) y la sociedad (como contexto macro).
En Next level: Jugando con la realidad, Xandra Villar Amigo se centra en el estudio y construcción de diferentes signos de comunicación visuales de carácter cultural. Investiga los juegos de mayor acogida popular y la apropiación de la estética de las normas de los juegos originales para entender el mundo como un sistema de representación no figurativo que da respuesta a muchos de los cuestionamientos de nuestra realidad más cercana.
Amanda Robledo junto con la Fundación Tuya, dirigida por Esther Ortega, nos propone AIREA, una invitación a pensar y a actuar juntos. Es un espacio para co-crear un mundo más inclusivo para personas con diversidad funcional cognitiva, un mundo mejor. AIREA es un evento diseñado con elementos de aprendizaje sencillos que suponen un proceso poderoso para: Construir comunidad + Activar la inteligencia colectiva+ Facilitar prácticas de liderazgo participativo
Laura Bañuelos de Movimiento Creativo nos propone Paisajes: de lo micro a lo macro, un taller intergeneracional que se articula alrededor de un camino de ida y vuelta desde el interior del cuerpo hacia el entorno que lo rodea, de la observación de lo más pequeño a lo más grande y de dar diferentes posibilidades de dimensión a nuestras acciones. Se tratará de descubrir el potencial que tenemos de intervenir en el mundo, iniciando la llama que despierte una acción crítica y colectiva y la creación de una base hacia una ciudadanía consciente.
La escuela de Teatro Aplicado, Cross Border Project en la que el teatro no es sólo un fin, sino un medio: para resolver conflictos, para recuperar historias olvidadas, para que personas de distintas generaciones o distintos países, jueguen juntos nos propone TeenTero, un laboratorio de creación colectiva con un grupo de adolescentes. Utilizando herramientas del teatro documental, los participantes crean una pieza escénica reflexionando sobre la idea de la propia vida como proceso educativo y de aprendizaje personal.
Pares Sin Pares es la propuesta de Joana Macedo, un baile en el que interrogarnos sobre los roles de género; experimentar una idea de encuentro que cuestione la normatividad. A través del cuerpo y del placer, encontramos una identidad que contesta la falsa rigidez social, instaura la naturaleza y sus potentes formas híbridas de ser y estar.
La Tercera Oreja, propuesta por Andrea De Pascual, Daniel Durán y Javier Durán parte de uno de los dispositivos más utilizados en la mediación en arte hoy en día es la audioguía. Este proyecto detecta y analiza este formato educativo para transformarlo y proponer una “escucha” alternativa que abrirá nuevos espacios de aprendizaje.
María Acaso presentará PDF, un encuentro con dos objetivos: La presentación en España del libro What´s Next in Art Education coordinado por Torsten Meyer y Gila Kolb de la Universidad de Colonia y de Kassel respectivamente y la muestra de un escaparate de las publicaciones más relevantes en educación artística que pueden contribuir a la creación de conocimiento en el terreno del arte+educación.
Angélica Dass continuará en la exposición con Humanæ, un proyecto, en desarrollo, que pretende desplegar un inventario cromático de los diferentes tonos de piel humana. Angélica acomete una taxonomía fotográfica de estas proporciones borgianas que ha iniciado adoptando un formato, el de las Guías PANTONE®, que desactiva cualquier pretensión de control o de establecimiento de jerarquías en función de la raza o la condición social. En el contexto de Ni arte, ni educación y a colación del proyecto Humanae, Angélica Dass implementará el taller ¿Color carne? que tomando como modelo sus series de Pantones, organiza unos talleres orientados a educadores. Por último y tras dos años sin ampliar Humanae en Madrid, Angélica Dass llevará a cabo una sesión fotográfica cuyos retratos pasarán a engrosar el ya célebre catálogo de pieles humanas.
Mônica Hoff llevará a cabo “Surrounding Education. Hacia nuevas integraciones con los campos curatoriales y artísticos” Este seminario de dos días proviene de la necesidad de explorar y debatir cómo los campos curatoriales y artísticas están siendo remoldeados por iniciativas educativas. Mônica entiende que para explorar sobre la idea de Comisariado Pedagógico necesitamos primero repensar el rol original del comisario. ¿Cómo cambian las tareas y funciones de este agente con esta nueva clasificación? Y dado que este rol fue desarrollado por artistas sería interesante reflexionar sobre cómo este nueva figura actúa más allá de la Biennial que es dónde originalmente fue concebido, ¿cómo podría funcionar este traspaso de artista a comisario en otros contextos? A lo largo de los últimos años la producción artística ha prestado una especial atención a la educación, ¿ha llevado esto a poder hablar también de «artistas pedagogos»? ¿Cómo y bajo qué circunstancias se puede dar a integración entre diferentes disciplinas? ¿Qué consecuencias acarrea este nuevo campo de actuación?